Si algo se busca en todas las empresas es la eficiencia laboral de sus empleados. Es algo así como el culmen laboral en general. Pero esto no es tan fácil de conseguir, sobre todo cuando se trabaja en grupos, y cada uno de ellos llevan una serie de tareas diferentes. Es necesario organizar cada grupo, y a la vez hacer organizaciones más precisas e internas. Pero se ha demostrado que trabajando así es como mejor se rinde a nivel general. En cualquier caso, siempre hay técnicas que se pueden aplicar para tratar de mejorar.
¿Qué es el Kanban y cuáles es su metodología?
Qué es Kanban podría responderse sencillamente diciendo que es el método que utilizó hace años la empresa Toyota para mejorar el rendimiento y la gestión del trabajo. De tal manera que crearon un sistema de producción realmente innovador y muy eficaz. Lo que se pretendía era minimizar los gastos innecesarios, dicho de otra manera: dejar de producir para tratar de vender. Así se erigió la idea de crear productos en base a las propias demandas de los clientes.
Se consigue unos mejores resultados a nivel general, por minimizar los gastos innecesarios, así como vender todo aquello que se está produciendo. Pero todo ello sin afectar a la cadena propia de producción, creando así un mejor producto en definitiva. Por todo esto, hoy día se sigue aplicando este tipo de estrategia u organización laboral, ya que sigue siendo realmente eficaz y positivo a nivel general.
Con este sistema se debe adaptar una serie de elementos para conseguir este sistema productivo. Lo primero que debe quedar claro es que el trabajo debe de ir gestionado por fases, de tal que se cree un panel de tareas, para que todo el mundo tenga acceso a la información, dividiéndose así las tareas en columnas y fases para tener un mayor control.
Otro elemento clave es la focalización, es decir, no es bueno tratar de llevar a cabo todas las tareas pendientes, porque así lo único que se va a conseguir ir dejando muchas a medias. Así lo que se trata de terminar cada una de las tareas de manera progresiva, antes de empezar una nueva. De hecho, este es uno de los pilares básicos del Kanban. Controlando así el flujo de trabajo y su correspondiente funcionamiento, y ver en todo momento lo que funciona o lo que hay que cambiar.
Variantes de este tradicional sistema de producción
A todo esto debemos sumarle las diferentes variantes y modificaciones que han ido surgiendo a lo largo de los años a raíz del método kanban. Tenemos el novedoso método GTD desarrollado por David Allen organizando con él todas las metodologías más productivas de trabajo y organización personal y laboral.
Básicamente lo que trata de hacer es que nosotros mismos podamos crear un sistema organizativo con el que podamos tener todo listo y bien atado, de tal manera que si nuestra memoria falla, no tengamos problema alguno. Ya que con este sistema o método, vamos a conseguir acordarnos de las cosas que tenemos que hacer en cada momento.
Esto hace que a lo largo del día podamos estar mucho más tranquilos, ya que lo que se va a conseguir es que estemos seguros de que nada se nos va a olvidar o escapar, y por lo tanto vamos a poder centrar nuestra atención en el trabajo que tenemos delante. Dejando a un lado el resto de pensamientos. Por lo tanto, lo que se logra al final es personas mucho más productivas a nivel general, que podrán centrarse en cada momento en trabajar en acciones concretas de una manera mucho más eficiente.
En definitiva, lo que se ha buscado con este método es aunar todas los demás métodos para crear algo definitivo. Pero es tan sencillo y básico, que es lo que precisamente hace que sea tan único y efectivo para todo el mundo. Esta es otra de sus ventajas: sirve para todas las personas, con independencia de su trabajo o estudios, para todos. De tal forma que la persona siempre tenga el absoluto control de su flujo de trabajo, controlando las tareas y compromisos en general.