A los españoles nos gusta cada vez más jugar. Y no solo al póker, las tragaperras o a las apuestas deportivas, nos aplicamos también con pasión a los denominados e-esports o deportes electrónicos, y a una gran variedad de videojuegos, algunos de ellos de larga tradición.
Pero, ¿quién está detrás de este mundo lúdico virtual? Aunque la industria de los videojuegos está dominada por los hombres, también hay una notable presencia femenina; son mujeres que se han abierto camino con nota sobresaliente y que influyen de manera decisiva en un mercado cada vez más amplio.
Algunos nombres propios
La cifra de mujeres en España vinculadas al sector de los videojuegos no llega a 900. Es decir, de los más de 5.000 profesionales que se dedican en nuestro país a la esta industria solo un 17% son mujeres y lo mismo ocurre en otros países del mundo. En términos globales, la mujer solo ocupa el 22% de los puestos pero han empezado a hacer oír su voz. Prueba de ello fue la campaña en Twitter con el hashtag #girlsbehindthegames, que en pocos días corrió como la pólvora por la red. A ella se sumaron multitud de ilustradoras, programadoras o diseñadoras, la mayoría desconocidas, pero que comparten intereses con un grupo que ha conseguido llegar a lo más alto.
– Carol Shaw
Ostenta el título de ser la primera programadora de videojuegos de la historia. Estudió Ciencias de la Computación en Berkely (1977) y antes de finalizar su máster de informática ya había fichado por la mítica empresa Atari. Su creación más exitosa fue el videojuego River Ride, basado en un avión de combate que recorre el curso de un río. El juego presentaba unas innovaciones nunca vistas hasta entonces y es todavía objeto de culto entre los aficionados.
– Roberta Williams
Esta norteamericana afincada en México fundó junto a su marido la empresa Sierra On line. De allí partieron Mystery House, The Wizard and the Princess y King’s Quest, el primer videojuego en 3D (año 1984). En total, han salido de sus manos casi una veintena de videojuegos que han alcanzado un notable éxito.
– Carla Meninsky
Es otro de los nombres propios de la programación vinculado a la empresa Atari. Su aportación más famosa para la firma fue el videojuego Warlords (1981). Posteriormente pasó a la empresa Electronics Arts, donde se ocupó del laboratorio en 3D. Tras formar su propia empresa se sintió atraída por la abogacía y se licenció en Derecho con la especialidad de protección de la propiedad intelectual. Su especialización le sirvió para defender litigios sobre robos de códigos fuente de los que fue testigo mientras ejercía de programadora.
– Corrinne Yu
Esta joven ingeniera gráfica de origen chino es hoy en día una de las figuras más aclamadas dentro de la creación de videojuegos. En su largo currículum, estrechamente ligado a la empresa Sony, se encuentran Brothers in Arms, Quake II, Anachronox, el motor de Spec Ops y números proyectos para PlayStation 4. En 2014 fichó para Amazon. Además de trabajar en la programación de videojuegos, ha colaborado con la NASA y ganó un premio de investigación sobre física nuclear.
– Brie Code
Forma parte de las nuevas generaciones de desarrolladoras de videojuegos. Esta joven canadiense regenta ahora su propia empresa, Tru Luv Media, pero durante muchos años fue la única mujer programadora en las compañías de su país. Estudió informática, prestó servicios en varias empresas hasta que aterrizó en Ubisoft Montreal. De su mano salieron varios juegos de la saga Assassins Creed. También formó parte del equipo de Child of Ligth, que tiene como protagonista a la heroína Aurora.
A través de su nueva empresa, Code pretende llegar a un sector de público muy concreto: aquel al que no le gustan los videojuegos. Su intención es crear una línea de pequeños video juegos con la colaboración de personas no afines a este entretenimiento.
Desarrolladoras en España
En España la actividad del juego online ha experimentado un fuerte crecimiento en los últimos años. Las páginas de apuestas deportivas junto con el póker en español y otras actividades de casino han despertado el interés del público, tanto masculino como femenino. Y junto a esa afición al alza ha crecido en paralelo una adoración por los videojuegos que ya existía de antaño, y que tiene también un componente femenino. Nombres como María Amores, Teresa Rico, Elena Candil, Inés Alcolea o Cristina Núñez ocupan ya un lugar destacado en el mundo de los videojuegos y la intención es crecer.
Para fomentar la participación femenina en esta industria y defender intereses comunes han surgido diversas asociaciones que aglutinan a desarrolladoras, diseñadoras e ilustradoras. El objetivo es ganar visibilidad y servir de motivación a las nuevas generaciones. Una de las asociaciones que sigue esta línea de trabajo es Women in Games Es, presidida por Gisela Vaquero. La entidad es un punto de encuentro, organiza eventos y ha participado en certámenes especializados, como el Mobile World Congress de Barcelona. También programa talleres y conferencias para animar a la mujer a introducirse en la industria de los videojuegos.
Otra asociación es FemDevs. La entidad colabora activamente en el proyecto Girls Makes Games, que organiza tallares y campamentos de verano para niñas. El objetivo es animar a las más jóvenes a conocer el desarrollo de los videojuegos y poner ante sus ojos una posible salida profesional. Para las adolescentes, los videojuegos son elementos de entretenimiento, pero pocas piensan que además pueden convertirse en una opción de futuro.
El proyecto Girls Makes Games es una iniciativa de LearnDistrict, una compañía californiana vinculada a la educación que defiende el papel formativo de los videojuegos. El equipo está formado por educadores y programadores y, además de organizar talleres, está creando una línea propia de videojuegos.
A la cabeza en la demanda de videojuegos
El consumo de videojuegos continúa en manos de los hombres. En el caso de España, por ejemplo, el 73% de los compradores de videojuegos online son hombres y en el resto de Europa se registran cifras parecidas.
Pero dentro de esa radiografía particular del juego destacan también las mujeres españolas. Según los últimos estudios de consumo, las españolas son las que más videojuegos consumen dentro de Europa, seguidas de las francesas y las austríacas.
