Un lienzo es un material textil de lino de algodón o cáñamo que utilizan los pintores como soporte para realizar sus obras. Pero además, se ha convertido en los últimos años en tendencia a la hora de decorar el salón. Colocar lienzos en las paredes es una fórmula decorativa que cada vez gana más adeptos, ya que se puede combinar con todo tipo de estilos.
Hay todo tipo de diseños de lienzos para decorar, aunque en la actualidad tiene un gran tirón la foto lienzo barato. Aquí podemos crear nuestros propios lienzos gracias a las diferentes opciones de configuración y la multitud de medidas disponibles. Un lienzo que podemos realizar con la máxima calidad a partir de cualquier fotografía artística, familiar o una foto collage.
Precisamente, es muy importante concebir previamente las medidas de los lienzos para ver cómo quedarían en la pared del salón. Una manera de planificar el espacio para no recargar demasiado el conjunto, pero a su vez para que el lienzo quede simétrico y haga juego con la decoración de la estancia.
No obstante, los lienzos no tienen porqué estar siempre colgados en la pared del salón. Se pueden colocar en las baldas de un mueble o una estantería (así no tenemos la necesidad de hacer agujeros en la pared) o apoyados en una cómoda acompañando a otro tipo de elementos decorativos. En este último sentido, lo más recomendable es escoger los lienzos de formato más pequeño, a ser posible cuadrados o rectangulares.
Personalizar las fotos o los diseños que vamos a incluir en el lienzo es todo un acierto. No en vano, se trata de un motivo decorativo con el que se busca que perdure en el tiempo. Poner una foto de este tipo siempre será del gusto de las personas que vivan en la casa, además de que siempre va a combinar con el estilo del salón.
Quedan muy bien, por ejemplo, los lienzos con fotografías propias que aludan a un mismo momento. Es decir, podemos tomar un lienzo y diseñar en él fotos de un viaje, fotos en familia o de algún momento determinado. Al tratarse de una misma temática, va a quedar muy bien sin desentonar con el conjunto.
En definitiva, decorar con lienzos las paredes del salón es una magnífica opción. Un soporte muy asequible y que nos puede servir para crear nuestros propios diseños y reservar un bonito rincón familiar en la estancia.