Sin duda alguna los auténticos protagonistas de la Navidad son los niños. A ellos les encantan estas fechas, que esperan con ilusión. Y es que son días para reunirse con toda la familia, reír, cantar, bailar, jugar y todas esas cosas que apasionan a los más pequeños de la casa.
El ambiente navideño es realmente mágico. Pero en buena parte lo es porque nos encargamos de darle ese aire a través de adornos, juegos, disfraces y otros muchos elementos para disfrutar en familia. Así que ahora que ya queda poco para las navidades de este año, vamos a hacer un repaso de las cosas que podemos hacer para que nuestros niños lo pasen en grande.
Hacer un teatro navideño casero
Los colegios suelen organizar representaciones teatrales inspiradas en cuentos navideños. Pues bien, del mismo modo podemos crear un grupo de teatro para actuar en casa delante de toda la familia en estas fechas tan señaladas. Hay muchas opciones para disfrazarnos en Navidad, con lo que las posibilidades se multiplican.
Es muy sencillo. Tan solo hay que escoger un papel para cada pequeño, con su correspondiente disfraz, preparar un pequeño escenario y elegir un guión fácil de aprender. Toda la familia vivirá un momento increíble viendo a estos pequeños actores en acción.
Jugar a la búsqueda del tesoro
La búsqueda del tesoro es uno de los juegos de Navidad de siempre, y resulta de lo más divertido. En función del nivel de dificultad elegido, será necesaria cierta preparación. Consiste en esconder un tesoro en casa, que puede ser chucherías, un regalo o algún detallito para el ganador, esconder las pistas que llevan a otras pistas y de este modo poder llegar al tesoro oculto.
Para que el juego sea más entretenido puede incluir adivinanzas o pruebas a superar. Lo bueno de la búsqueda del tesoro es que se estimula la imaginación mientras se pasa un buen rato, y se potencia el espíritu aventurero de los niños de la familia.
Competir en un karaoke de villancicos
Este juego es especialmente sencillo, ya que el ganador será quien más villancicos sepa. Para jugar hay que escribir nombres de canciones navideñas en pequeños papeles y meterlos todos en una bolsa. Después cada niño sacará un papel, y cantará aquella canción que le ha tocado, ganando un punto si logra hacerlo bien. El karaoke continúa hasta que el ganador pueda reunir todos los puntos posibles, hasta que no sea posible conseguir más. Los pequeños lo pasarán como nunca cantando y compitiendo por ser vencedores.
Hacer postres navideños
¿Quién dijo que preparar los postres y dulces de la Navidad es tan solo cosa de adultos? Un juego bastante educativo es involucrar a los más pequeños en la preparación de pestiños, turrones, mazapanes o cualquier postre que vaya a formar parte del menú navideño.
Obviamente no hablamos de poner a los pequeños en los fogones, ya que no tienen edad ni experiencia para ello. Pero nada impide que preparen los ingredientes, formen masas y den formas, de manera que se vayan familiarizando con las labores culinarias mientras que pasan una tarde ideal con sus seres queridos.
