Quizás muchas personas no estén al tanto de esto, pero en España existe un registro de personas y empresas morosas ante alguna entidad financiera y pagos de facturas de servicios, algo que suele complicar que un banco apruebe un crédito, ya que tener un historial limpio es aval de buen pago.
Este registro de morosos es gestionado por la Asociación Nacional de Entidades de Financiación (ASNEF), un organismo que mantiene control exacto de las deudas, desde el momento que una organización denuncie el impago de al menos 1 euro.
Si tienes planteado hacer la solicitud de un crédito, pero apareces en el listado de ASNEF, hay algunos pasos que tendrás que seguir para recuperar la credibilidad ante las instituciones financieras y conseguir un préstamo y créditos rápidos sin aval.
Consejos sobre créditos sin importar historial crediticio en ASNEF
La lista de ASNEF puede ser una gran limitante, pero no cierra por completo la oportunidad de acceder a un crédito. Es absolutamente cierto que el pertenecer a este registro, cierra las puertas de los préstamos en el sistema bancario tradicional, pero en internet es posible localizar diferentes empresas financieras que pueden considerar el financiamiento, cuando la deuda no supera los 1000 euros, ni ser de una tarjeta de crédito u otro producto de la banca tradicional.
Por supuesto, hay ciertos requisitos mínimos que cumplir, tal como contar con DNI y acreditar una fuente de ingresos suficiente y estable, aunque no dependa de una nómina.
Cómo puedes observar, no es imposible conseguir créditos con ASNEF y sin aval, aunque es un proceso mucho más tedioso que teniendo un historial limpio. Hay algunos consejos que te ayudarán a conseguir el objetivo.
Actúa con prudencia
Al solicitar cualquier producto financiero es necesario ser prudente y responsable. Es mejor negarse a un crédito, que desequilibrar la economía personal y caer en deudas, pagar intereses excesivos y quedar en listas negras como el ASNEF.
Es preferible conseguir créditos de montos pequeños, con cuotas mensuales que podamos cubrir, y que no pongan en riesgo nuestro patrimonio y bienestar personal. En este sentido, es mejor evitar los préstamos que incluyen garantías hipotecarias, ya que serán muy difíciles de solventar.
Solo acude a estos financiamientos en caso de verdadera necesidad. Son herramientas útiles para solventar inconvenientes, pero tendrás que analizar en profundidad la oferta y condiciones, así podrás elegir el que suponga un menor riesgo para tu salud financiera.
Resuelve de inmediato tus deudas
Toma en consideración que deberás limpiar tu historial crediticio. Cuando apareces en los ficheros de morosidad, tienes hasta 30 días para cancelar tu deuda, de lo contrario permanecerás durante seis años en el registro.
Nunca pidas financiamiento si las fuentes de ingresos que posees resultan insuficientes. En general, todo crédito será negado a personas cuyas deudas superan el 35% de sus ingresos. El ingreso mínimo de una persona deberá encontrarse entre los 400 hasta los 1200 euros mensuales, para calificar a un préstamo fuera del sistema bancario tradicional.