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Nutrición

¿Es el chile pasilla el chile perfecto para tu salsa?

Preparar una buena salsa no es solo tomar algunos ingredientes y mezclarlos. De hecho, el éxito está en elegir bien esos ingredientes. Algo fundamental es la elección del chile. Entre todas las variedades secas, el chile pasilla tiene un sitial de honor por su sabor único y su versatilidad.

Este tesoro de la cocina mexicana tiene la magia de transformar cualquier receta en algo inolvidable. Pero, ¿por qué es tan importante escoger bien y cómo influye el chile pasilla en tus salsas?

¿Cómo es el chile pasilla?

El chile pasilla, también conocido como “chile negro”, es la versión seca del chile chilaca. Su apariencia es inconfundible: oscuro, arrugado y con un brillo que promete sabores profundos. Su perfil combina notas ahumadas, un toque dulce y matices terrosos, lo que lo hace perfecto para darle personalidad a tus platos. 

Sin importar si lo usas en tacos, enchiladas o para acompañar un trozo de carne, la salsa de chile pasilla siempre cumple. No obstante, hay que saber que no todos los chiles pasilla son iguales y que su calidad puede impactar en las recetas. Por lo tanto, la clave radica en saber escogerlo. 

¿Cómo identificar un buen chile pasilla?

Con estos tips, puedes elegir el mejor chile pasilla para tus salsas:

  • Color y brillo: su color debe ser oscuro, uniforme y brillante. Si hay manchas grises o tonos apagados, es mejor evitarlos. 
  • Textura: toca el chile para asegurarte de que sea flexible, no seco al punto de quebrarse.
  • Aroma: debe tener un aroma profundo, ligeramente dulce y ahumado. Si no huele a nada o tiene un toque rancio, no lo compres.
  • Forma y tamaño: elige chiles de tamaño uniforme y que no tengan agujeros que indiquen la presencia de insectos. 

Recetas deliciosas con chile pasilla

Ahora que sabes cómo elegir el mejor chile pasilla, es momento de cocinar. Aquí tienes varias recetas para empezar:

Salsa clásica para tacos

Ingredientes: 

  • 4 chiles pasilla.
  • 2 jitomates. 
  • 2 dientes de ajo.
  • 1/2 cebolla. 
  • Sal al gusto. 
  • Agua o caldo de pollo.

Preparación:

  1. Tuesta ligeramente los chiles en un comal, prestando atención para que no se quemen. Luego, remójalos durante 10 minutos en agua caliente.
  2. Asa los jitomates, el ajo y la cebolla hasta que estén bien dorados. 
  3. Licúa todos los ingredientes con un poco de agua o caldo. Ajusta la sal y listo. 

Salsa cremosa de chile pasilla

Ingredientes:

  • 3 chiles pasilla. 
  • 1 taza de crema mexicana. 
  • 1 diente de ajo.
  • 1/2 taza de caldo de pollo. 
  • Sal al gusto. 

Preparación:

  1. Remoja los chiles como te indicamos en el paso 1 de la receta anterior. 
  2. Licúalos con el ajo, la crema y el caldo hasta obtener una crema. 
  3. Cocina la salsa a fuego lento y ajusta la sal. 

Salsa de chile pasilla y cacahuate

Ingredientes: 

  • 3 chiles pasilla. 
  • 2 cucharadas de cacahuates tostados. 
  • 1 jitomate. 
  • 1 diente de ajo. 
  • 1/2 cebolla.
  • Agua o caldo.
  • Sal al gusto.

Preparación:

  1. Limpia y remoja los chiles. 
  2. Asa el jitomate, el ajo y la cebolla. 
  3. Licúa todo junto con los cacahuates y un poco de agua o caldo. 
  4. Cocina la salsa unos 10 minutos a fuego bajo, ajustando la sal. 

Algunos trucos para sacarle el máximo al chile pasilla

  • El pasilla combina muy bien con otros chiles secos como el guajillo o el ancho. Así que una idea es mezclarlos para obtener un sabor más complejo. 
  • Tostar los chiles intensifica sus sabores, pero ten mucho cuidado: si se queman puede amargar la salsa.
  • No necesariamente tienes que licuar a la perfección. De hecho, usar un molcajete o mortero puede darles un toque más tradicional a tus salsas, asegurando que tengan más textura. 

Recuerda lo más importante: tómate el tiempo para elegir los mejores chiles pasilla, aquellos que sean brillantes y aromáticos, para que puedas crear salsas llenas de sabor y tradición. 

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