Desde hace mucho tiempo ha crecido la preocupación por el uso excesivo de bolsas de plástico y el gran volumen de desechos plásticos de un solo uso que genera cada ciudadano en su vida cotidiana.
Como respuesta a esta problemática, el uso de bolsas ecológicas se ha convertido en una solución de gran impacto. La marca estadounidense Baggu se ha unido a la tendencia de ofrecer bolsas reusables de alta funcionalidad y máxima resistencia, por lo cual pueden ser utilizadas una y otra vez, ahorrando recursos y colaborando con el cuidado del medio ambiente.
Acciones tras la prohibición de la entrega de bolsas en el supermercado
En España y otros países del mundo se han tomado acciones drásticas que buscan disminuir la huella plástica. Una de esas acciones ha sido la prohibición y consecuente penalización de los establecimientos que entreguen bolsas desechables a los clientes.
Las grandes cadenas de supermercado han acatado la normativa de manera progresiva, llegando al punto en que ya son varios los países donde cada usuario tiene la obligación de llevar sus propias bolsas reutilizables cuando realizan sus compras.
Prohibir la entrega gratuita de bolsas de plástico es el primer paso para aliviar el problema medioambiental, pero un gran porcentaje del problema debe tratarse en base a un cambio en la mentalidad de los consumidores, quienes durante décadas se han acostumbrado a adquirir productos con empaquetados de un solo uso.
Conciencia sobre la importancia del uso de bolsas reutilizables
Una de las primeras soluciones que han sido aplicadas luego de la prohibición de las bolsas ha sido la implementación de un tipo de bolsas con alto nivel de biodegradabilidad, elaborados con materiales reciclados y que se convierten en una solución interesante, pero no completamente adecuada.
¿Cuál es el problema de esta clase de bolsas? Por sus propiedades biodegradables, se descomponen en compostas orgánicas en un plazo de 18 meses, sin embargo, deben darse determinadas condiciones para que esto ocurra.
Entonces, no son una solución definitiva, simplemente una forma de hacer más tenue el problema general y no agravarlo. Frente a los cientos de años que tarda el plástico normal en degradarse, parece una alternativa interesante, pero hay opciones más contundentes.
Las bolsas reutilizables son la solución más realista para disminuir desecho de plásticos de un solo uso. Siendo resistentes al uso, pueden ser usadas una y otra vez sin que se produzca ninguna clase de desgaste, de modo que no es necesario utilizar recursos para fabricar nuevas.
El objetivo de su uso es que las personas comprendan la importancia de la prevención de la contaminación, y valoren así la relación coste/valor que tienen las bolsas reutilizables.
Adicionalmente, las bolsas reutilizables con diseños asociados a marcas se han convertido en un potente formato de publicidad, teniendo gran aceptación e impacto en la sociedad. Es una forma de publicidad masiva que desde hace ya bastante tiempo se ha hecho presente en una infinidad de eventos, exposiciones, activaciones de productos y siendo vendidas por los propios supermercados para favorecer el reconocimiento de marca.
