Desde el principio de la historia, hombres y mujeres han utilizado el maquillaje para el desarrollo de actividades culturales y sociales. Éste ha transformado su significado y función a través de las sociedades, el tiempo y el lugar. Es una herramienta para expresarse sin necesidad de palabras, con la que se logra destacar ciertos aspectos personales y ocultar imperfecciones que podrían ocasionar problemas de autoestima.
A continuación, se desarrollará todo lo relacionado al uso del maquillaje en diversas situaciones, además de los beneficios al valorizar el rostro para dar una imagen diferente.
La autoestima y el maquillaje como aliados
El maquillaje hoy en día es un elemento fundamental para la mujer por su importancia en el proceso de eliminar los problemas de autoestima que surgen de manera frecuente con la aparición de imperfecciones en la piel.
Estudios psicológicos han demostrado que la aplicación de estas técnicas de coloración que modifican el aspecto de la piel de la persona, ayudan a elevar su estado de ánimo, bien sea en el momento de afrontar una enfermedad o ante la presencia del temido acné, ojeras, manchas en el rostro, o incluso en la búsqueda de su identidad.
Pasos para iniciarse en las técnicas de maquillaje
Para iniciar el recorrido por el mundo del maquillaje, en primer lugar, es necesario conocer la composición del rostro, para resaltar sus características con un maquillaje específico que contenga los colores adecuados para cada tono de piel.
Por ejemplo, si el rostro es rectangular puede maquillarse para dar volumen, a las zonas laterales junto con un cabello largo. Otra forma de rostro conocida es el rostro cuadrangular, y en éste es importante mostrar redondez para suavizar las facciones más duras y poco femeninas.
Las personas con un rostro redondo poseen armonía en sus facciones, por lo que requieren muy poco maquillaje, y resaltan con una cabellera larga. Al contrario de los rostros hexagonales, en los que es necesario disimular los pómulos anchos. O los rostros triangulares, donde debe maquillarse la parte alta de las sienes para disminuir las mejillas.
Otros aspectos que no pueden ser pasados por alto
En segundo lugar, debe conocerse la composición del maquillaje con el fin de invertir en los productos más apropiados en base a las características de la piel. En teoría, el maquillaje se compone de pigmentos cuya función es proporcionar color y corregir la iluminación, mediante blancos o coloreados, fotocrómicos y nacarados.
La base elaborada en aceite, cera, silicona o agua, es un componente que depende en su totalidad del maquillaje a formular con polvo compacto, polvo libre o emulsiones. Por último, los aditivos acompañan al pigmento, y la base para aumentar la calidad del maquillaje además de unificar el tono de la piel.
Para hacer del maquillaje un aliado y no un dolor de cabeza, siempre es recomendable ver los productos de maquillaje de Aromas ideales para hacer una inversión de calidad y bienestar tanto físico como emocional.
Consejos para invertir en cosméticos de calidad
En el mercado es posible escoger entre la gran variedad de cosméticos para cada tipo de piel y edad, están los correctores, los compactos en crema y polvo, bases, delineadores de ojos, máscara de pestañas, labiales y sombras, que no pueden faltar para el maquillaje personal diario.
Para lograr un aspecto natural que se adapte a las condiciones del día, sólo es necesario utilizar tonos suaves y cálidos en los ojos, junto con un “blush” rosado para las mejillas, una o dos capas de máscara para pestañas, y finalizar con un ligero toque de pintura en los labios. Si se desea conservar el look natural, puede utilizar una crema hidratante para humedecer el rostro o cremas de color, que contienen maquillaje y suavizan la piel.
Sin duda, el maquillaje como forma de expresión va más allá de la estética, representa feminidad, poder, seguridad y confianza. Para verse y sentirse bien, no hace falta más que dedicar tiempo a esta forma de arte para optimizar el cuidado personal, por ello la tecnología ofrece lo mejor para el cuidado de la salud y la belleza del ser humano, promoviendo el uso de cosméticos seguros para transformar la forma en que se visualiza una persona y se relaciona con los demás.