Siempre que se habla de alta cosmética, se suele caer en el error de pensar que la conforman todos aquellos productos cosméticos pertenecientes a grandes marcas, aquellos que tienen los precios más caros. Un error de base, ya que no tiene nada que ver con lo que da forma a esa categoría en este sector, y es que su nombre va mucho más allá.
La Alta cosmética puede ser más cara en muchas ocasiones, pero no siempre es así. Lo que la define y caracteriza es que se trata de una rama de la cosmética cuyos productos están hechos para superar la barrera de la epidermis y adentrarse aún más en la piel. Todos los altos cosméticos son capaces de tratar hasta dolencias o problemas en la piel.
Qué diferencia a la alta cosmética de la baja cosmética
La principal diferencia entre la alta cosmética y la baja cosmética es su composición. Los productos de la primera cuentan con unos componentes, unas sustancias que les permiten traspasar la epidermis para llegar hasta la dermis. Se adentran mucho más en el órgano más grande de todo nuestro organismo, la piel.
Llegan a la capa intermedia de la piel para poder tratar esos problemas que la baja cosmética no alcanza a rozar siquiera. Las patas de gallo, las arrugas, las marcas de expresión y otros tantos factores que aparecen por el paso del tiempo o el efecto de los agentes externos pueden ser combatidos gracias a esta rama de la cosmética.
Así, para terminar de despejar cualquier duda, podemos proceder a explicar qué es la baja cosmética. Esta no es más que la otra rama de la cosmética, considerada también como el «mass market» del sector. Aquí se encuentran todos aquellos productos que no logran superar esa barrera de la epidermis, realizando un tratamiento superficial.
Beneficios de la alta cosmética, ¿cuándo debe utilizarse?
¿Cuándo se debe recurrir a la alta cosmética? Lo cierto es que es la pregunta más habitual cuando se aborda esta materia, y es que sus productos sí que suelen ser más caros que la tradicional. Pueden darse casos en los que no sea así, pero sus cifras suelen ser más elevadas en general.
Por lo habitual, se debe recurrir a este tipo de cosméticos cuando se busca algo de calidad en cuanto a higiene facial o cremas faciales, si se quiere tratar toda la zona de los ojos o incluso revitalizar toda la piel en general. Suele ser muy efectiva para frenar los signos del envejecimiento, combatir las arrugas o ayudar incluso a reducir las estrías.
Por eso, siempre que se recurre a un profesional de la Perfumería y cosmética en este tipo de casos, se suele recomendar utilizar este tipo de producto. Pero, ¿cuáles son los beneficios principales que ofrece esta rama de la cosmética?
Ventajas y beneficios principales de la alta cosmética
Para entender mejor por qué son tan aconsejables estos productos, hay que tener muy claro su alcance. Llegan donde otros no son capaces siquiera de asomar, rompen las barreras de la piel para entrar en capas más profundas y ofrecer una mejor y mayor reparación donde es necesario.
Son productos totalmente seguros, ya que cuentan con profundos estudios a su espalda. Grandes sesiones de testeo para comprobar que todo funciona como es debido, composiciones elaboradas con los mejores ingredientes posibles, las sustancias más avanzadas y los métodos más eficientes.
Asimismo, sus resultados pueden llegar a sustituir incluso a tratamientos de cirugía estética convencionales. En ocasiones, usar la alta cosmética puede hacer que no sea necesario recurrir al bisturí, con lo que eso implica de cara a postoperatorios o incluso a costes económicos.
Cuándo y cómo usar la alta cosmética
Para empezar, hay que tener claro que estos productos no deben usarse constantemente, ni sin una razón de peso. Son muy beneficiosos, pero esas ventajas que ofrecen frente al resto solo se pueden aprovechar realmente si se utiliza cuando llega el momento adecuado para hacerlo.
Por eso, lo mejor es recurrir a un farmacéutico profesional o a alguna persona experta en cosmética para valorar cuándo es realmente aconsejable recurrir a la alta cosmética. Preguntar a profesional especializado en salud y, sobre todo, en cuidados de la piel, es una muy buena forma de proceder.
Generalmente, el tiempo adecuado para dar este paso es cuando se plantea la necesidad de tratar arrugas, estrías o cualquier otro problema que afecte a la piel y solo se pueda arreglar «desde dentro». Y es que, como hemos dicho previamente, puede sustituir incluso a algunas intervenciones de cirugía estética.
En cuanto a su uso, la respuesta es tan sencilla como echar un vistazo a las indicaciones y recomendaciones de los fabricantes del producto. Cada propuesta de la alta cosmética cuenta con unas instrucciones propias que han de seguirse a rajatabla si realmente se quiere sacar partido a lo que ofrecen. De lo contrario, estarás malgastando tiempo y también dinero.
La alta cosmética lleva ya un tiempo entre nosotros, pero todavía hay muchas personas que consideran que simplemente se trata de una gama de productos más caros por las marcas de las que proceden. Como decíamos al comienzo, catalogarla solo por eso es un grave error, ya que detrás de ellos hay una complejidad enorme.
Los mejores resultados gracias a los mejores componentes y los mejores procesos de elaboración. Su propuesta solo quiere mejorar la calidad de vida y la salud de la piel de quienes recurren a ella. Ese es su cometido principal y eso es lo que consigue cuando se usa como es debido.
Y tú, ¿vas a comenzar a apostar por la alta cosmética? Si tenías dudas sobre ella, esperamos que toda esta información te haya servido para saber bien qué es lo que ofrece realmente y por qué está ganando tanto terreno en los tiempos que corren. Son mucho más que cremas caras para la cara y la piel en general. Son productos que pueden rejuvenecer tu piel por completo, y de una forma más que sencilla.