Hoy en día está totalmente demostrado que ciertos alimentos o tipos de dieta pueden mejorar las posibilidades de que culmine con éxito un tratamiento de reproducción asistida.
En este post hacemos un recuento con algunos componentes que científicamente se ha demostrado que resultan positivos, así como también aquellos que resultan contraproducentes para lograr el embarazo.
Lo que sí se recomienda comer para la reproducción asistida
Algunas de los recomendaciones alimenticias para mejorar las posibilidades de éxito son:
Vitamina D
Una investigación de científicos de la Universidad de Birmingham publicada en 2017 en la revista especializada Human Reproduction, documentó el hecho de que las mujeres que estaban bajo un esquema de reproducción asistida pero tenían bajos niveles de vitamina D, tenían una tasa mucho menor de culminación con éxito.
Algunos métodos como la fertilización in vitro o la fertilización ICSI (Conoce los principales métodos de reproducción asistida), se constató que resultan altamente efectivos cuando se combinan con los niveles recomendados de vitamina D (75 nmol por litro de sangre). Los científicos demostraron que este tipo de vitaminas mejoran un 33% las posibilidades de dar a luz a un bebé con vida.
En este sentido, alimentos como el aceite de hígado de bacalao, pescados como el salmón rojo y la caballa, el salami, caviar, huevo y los cereales fortificados -además de una buena y saludable ración de sol-, serán de gran ayuda.
Más proteínas, menos carbohidratos
Por otra parte, investigadores del Colegio Americano de Obstetricista y Ginecología, documentaron el hecho de que las mujeres bajo un tratamiento de reproducción asistida, con una alta ingesta de proteínas y baja en carbohidratos, tenían una tasa hasta 4 veces superior de éxito.
Claro que, esto no significa eliminar totalmente los carbohidratos, pero sí reducirlos a menos del 40%; manteniendo al menos una ración con un 25% de alimentos altos en proteínas.
Dieta Mediterránea
Posiblemente esto se relacione con el hallazgo de científicos de la Universidad Harokopio de Atenas, quienes documentaron la forma en la cual las mujeres que recurrían a la Dieta Mediterránea desde seis meses antes de iniciar algún método reproducción asistida, tenían mayores posibilidades de culminar con un proceso feliz.
Esta dieta, reconocida por la UNESCO como patrimonio de la humanidad, y que ha demostrado ser también una excelente forma de conservar la buena salud, es rica en vegetales, frutos, granos integrales, pescados, además de admitir un poco de vino y aceite de oliva. Aunque en este caso se puntualiza la importancia de reducir el consumo de carnes rojas.
A diferencia de las otras recomendaciones, aquí la sugerencia abarca también al hombre, ya que de igual forma se ha comprobado que este tipo de alimentación permite favorecer la calidad de su semen.
Lo que no se recomienda comer para la reproducción asistida
Por otra parte, también hay componentes que NO benefician el proceso de reproducción asistida, comenzamos con algunos que simplemente se ha comprobado que es falso el rumor de que ayuden en algo, pero hay otros donde se ha documentado que resultan contraproducentes.
Sin gluten
Durante algún tiempo se llegaron a generar ciertos rumores que aseguraban que una alimentación libre de gluten resultaba beneficiosa para las mujeres en fase de reproducción asistida, lo cual ha sido descartado por investigaciones científicas recientes.
Académicos de la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM) condujeron una serie de investigaciones que comprobaron que una alimentación libre de gluten, no eran un factor que incrementara la tasa de éxito en tratamientos de reproducción asistida.
Grasas
Científicos del Harvard School of Public Health también llegaron a conclusiones que exponen evidencia de que un consumo excesivo de grasas saturadas e insaturadas es un factor para reducir las posibilidades de éxito para este tipo de casos.
En el estudio llevado a cabo en el Hospital de Fertilidad de Massachusetts se determinó que esta alimentación deficiente provoca que las mujeres generen un promedio menor de ovocitos maduros de metafase II, lo que representa una importante debilidad en los embriones.
Químicos
Asimismo, existe una abundante cantidad de pesticidas y agroquímicos que de igual forma resultan nocivos para la fertilidad, por lo que priorizar el consumo de productos orgánicos, o realizar las técnicas apropiadas para lavar bien los vegetales, resulta conveniente, como también lo es minimizar el consumo de aquellos más susceptibles (ejemplo: fresas, manzanas, nectarinas o manzanas).
De igual forma, otras sustancias altamente nocivas para la fertilidad, como los bifenilos policlorinados (PBC), pueden introducirse a la dieta, por lo que es importante cuidar tanto los tipos como la calidad del pescado.
También se recomienda evitar el consumo de alimentos procesados que vienen en plásticos herméticos, pues pueden almacenar bisfenol-A (BPA), lo cual afecta particularmente a hombres.
Procesados de carne
Respecto al género masculino, también se recomienda moderar el consumo de carne para un semen de mejor calidad. Estudios de la ASRM concluyeron que aquellos hombres que destinaban más de un tercio de su ingesta diaria a alimentos cárnicos procesados, presentaban una mayor tasa de anormalidades en la composición de su esperma.
Cuidado con la mala nutrición
Aunque uno de los factores que definitivamente son esenciales para un óptimo proceso reproductivo es el hecho de mantener una alimentación completa y equilibrada.
Como hemos mencionado, es importante que esto se presente desde antes de iniciar el tratamiento de reproducción asistida, pero igualmente es esencial mantenerlo durante todo el proceso. Haciendo hincapié en que la alimentación no es como una semana de trabajo, donde se tienen uno o dos días de excepción, sino que se debe mantener una alimentación de calidad, el mayor tiempo posible, para en verdad poder maximizar las posibilidades de éxito.
Ojo con la obesidad
Comer bien no significa comer mucho, también es importante poner mucha atención con el sobrepeso, pues este es también uno de los principales factores que llegan a impedir la culminación de un tratamiento de embarazo asistido.
Como puedes ver, la alimentación puede influir de múltiples formas en el proceso de reproducción asistida, aunque lo mejor será trazar con el apoyo de expertos, la ruta más adecuada para tu caso, y tratar de respetarla en la mayor medida de lo posible; cada esfuerzo, incrementará las posibilidades de al final tener una invaluable recompensa.